Los chicos y chicas de mi escuela como todos los de Cataluña han comenzado hoy la selectividad. un año especial, sin duda. Tres meses de clases on-line, cinco semanas entre el final de curso y el examen, mascarillas, geles, algo que nadie podría haber imaginado. Sin embargo, además de todos estos obstáculos se han añadido algunos más fruto de la inoperancia, falta de previsión, arrogancia, ¿qué se yo? El caso es que la administración catalana anunció a bombo y platillo que este año los centros se desplazarían lo menos posible por las circunstancias, que además de las universidades se abrirían centros públicos, incluso que se podría hacer en el mismo centro.
Más de veinticinco años llevaba mi escuela yendo al mismo sitio, un paseo de media hora andando o diez minutos de metro. Cual es nuestra sorpresa cuando nos cambian de ubicación y no sólo no nos envían más cerca si no que nos manda a la otra punta de la ciudad, algunos de nuestros alumnos con más de una hora de transporte público. Al principio lo consideramos un error pero cuando pudimos, difícil, contactar con ensenyament, la respuesta fue (y no muy educada) que no nos quejáramos que éramos de la zona alta y que hacíamos los exámenes en la Diagonal. Hubo que explicarle que lo que entienden por zona alta es el distrito de Nou Barris en la zona norte, limítrofe con Montcada y a un paso de Santa Coloma y que llevamos más de un cuarto de siglo sin pisar la Diagonal para estos menesteres La cosa podría quedar en un cabreo pero cuando sabemos que hay centros que han podido hacer la prueba in situ (se nos dice que es que no nos presentamos, hemos reclamado la notificación que se debió hacer y, por supuesto no existe) rompiendo la neutralidad a la hora de corregir puesto que se garantiza el anonimato del alumno pero no el de la escuela a la que va, cosa fundamental para garantizar la igualdad de oportunidades. Y sobre todo, cuando afecta a escuelas, no somos la única, de la parte norte de la ciudad, esa parte alta que dice la conselleria, que se han visto desplazados a sitios más alejados del lugar habitual… La cosa es cuando menos sospechosa. Máxime cuando a nuestro centro lo rodean cuatro institutos públicos cerrados ya que dice la conselleria que los directores no han querido abrir (se ve que son todopoderosos y lo de servicio público es un eufemismo) O lo que es lo mismo la red de centros públicos que es la suya después de llenarse la boca de proximidad no abre, ¿quizás para no gastar en limpieza o personal?
Hoy algunos de nuestros chicos y chicas se han levantado a las seis de la mañana para hacer el por ahora examen más importante de su vida haciendo traslados de más de una hora en metro. Gente de Nou Barris, el distrito con menos universitarios de la ciudad y al que la Generalitat pone. y lo digo claramente, impedimentos para mejorar esas cifras. Supongo porque no son importantes, no quiero pensar en motivaciones de otro tipo pero «se non e vero…»
Llevo muchos años en este centro de barrio del distrito de Nou Barris y me siento muy orgullosos. Es un concertado pero no de esos de élite y pago sino de los que tenemos el mismo perfil de alumnado que el resto del distrito, chavalas y chavales de Ciudad Meridiana, Santa Coloma, Montcada, Ciutat Meridiana, Torrebaró,.. (los de la conselleria que lo busquen en las mapas y no confunda zona alta con zona norte) Es decir servicio público. Cuando me preguntan que es lo que más me llena de mi oficio respondo que ver que esos chicos y esas chicas partiendo de donde parten terminan sus estudios y van a la enseñanza superior en pie de igualdad con los demás cosa que , a veces me pregunto, y hoy más que nunca si los que tienen que velar por la equidad y la igualdad de oportunidades están por ello o por otra cosa o, simplemente estamos ante la inutilidad manifiesta de una administración.