Paso el 39 Congreso y ya tenemos Secretario General. El nuevo PSOE está en marcha. Lo que me pregunto es ¿hasta cuando? porque mucho me temo, y me puedo y quisiera equivocar, que la guerra continúa. ¿ Y porqué? En primer lugar tenemos un nuevo editorial de El País atizando a Pedro Sánchez y hablando de un partido desnortado. Si no hubiera agua en la piscina el diario de marras, en el que tienen mando en plaza, algunos de los viejos próceres del socialismo, no se tiraría una vez el congreso ha establecido el nuevo rumbo y al que al menos, eso dice la cortesía no escrita, hay que dejar 100 días a ver como se manifiesta.
Más cosas. Los congresos a la búlgara, como se llamaban antiguamente, no eran buenos. Las unanimidades ocultan muchas cosas. Aquí todo ha sido descarnado, y no está mal que lo sea pero pone de manifiesto el problema, más de 200 delegados se abstienen en todas las votaciones. Si nos lo queremos creer cada delegado es dueño de su decisión, pero como llevamos muchos años en esto utilizaré la frase de Shakespeare «Algo huele a podrido en Dinamarca» Alguien, uno o varios, dieron la orden. Lo mismo que la no asistencia al cierre de muchos que tenían que coger los respectivos medios de transporte, muchas ocupaciones o mala comunicación de la capital.
La ejecutiva es la de Pedro Sánchez, sólo faltaría que el Secretario General no pudiera rodearse de gente de confianza después de vivir lo que vivió, sin embargo, suenan voces de que va contra la tradición de ejecutivas con equilibrios. Ahora hay que hacerlos cuando la verdadera tradición del PSOE es la de liquidar al contrario perdedor. No es que considere que es mejor así pero precisamente las voces que lo reclaman, en fin…
Y después el Comité Federal , donde todo estalló el 1 de octubre y donde podrían pasar cosa porque en la lógica de la supervivencia política ahora manda quien manda pero en un futuro… Y mucho me temo que los miembros del Comité están elegidos en esta lógica, para un lado y para el otro… Quizás una percepción malsana…
Y, por último, el discurso del Secretario General y esto si que es subjetivo. Le vi flojo, entre cansado o triste no lo sé, desgranando sus propuestas a lo mejor en la convicción de que una tras otra iban a ser machacadas por la prensa o por ese 30% de la organización que ha mostrado su desacuerdo, legítimo, pero desacuerdo, Un desacuerdo que en la tradición organizativa del PSOE significa tambores de guerra.
Pedro ha vuelto, contra el viento y de costado. No sé cuanto es el tiempo que le dejarán comandar la nave, es posible que sólo tenga una oportunidad pero mi percepción, que repito, espero que sea equivocada y fruto de la imaginación es que estamos en un paréntesis.
Por último, y para que no haya dudas, estoy alineado con el Secretario General y le quiero agradecer algo que dijo e hizo en su discurso, Carmen Chacón ayer 18 de junio de 2017 ganó el congreso de Sevilla, si hubiera sido así en su día quizás aquellos polvos no hubieran traído estos lodos.